mayo 16, 2008

Jinetes en la tormenta

Amanece en Venice Beach, y mientras las olas chocan contra las blancas arenas de la playa, los motores de los coches lujosos empiezan a rugir en el asfalto del bulevar de Santa Mónica.

Mi pensamiento se dispersa y el sentimiento de amor-odio también despierta como el día, y esos sonidos lejanos me susurran al oído: "no la ames tan locamente"; esta ciudad poblada en partes iguales de visitantes y buscadores de oportunidades, llena sus calles pero vacía los corazones de quienes la habitan; la visión idílica del resplandor del sol en las aguas del amanecer se torna en vacío de sentimientos y plenitud de ambiciones.

Despierto en la soledad de mi apartamento tras una noche de locura y excesos, con el rugido de los motores de los coches que pasan bajo mi ventana y siento la presión en mis sienes de una noche interminable, bajo los neones de esta mujer de Los Angeles, poblada de bares de topless, de policías en sus coches y de oscuros callejones.

Comienza un nuevo día en el que intentaré espantar mis fantasmas y formar parte de la gente que puebla los paseos y calles, tanto en la parte alta como en la parte baja de la ciudad; que camina por las playas para disfrutar del calor del sol y de la calma del aguas que ahora se agitan.

La saliva pastosa se agolpa en mi garganta y la sequedad de mi boca se refresca con un soplo de la brisa matutina que entra por la ventana de mi apartamento, próximo a la playa, mientras mi mente se debate entre la inmensidad del mundo y mi significancia microscópica.

He nacido en esta casa como un perro sin hueso, como un actor sin papel, desnudo en un universo de inclemencias, preso por la ambición y los deseos terrenales, que me alejan del aprecio sencillo de una puesta de sol, de la belleza del cielo oscuro en el que parpadean las estrellas y que habitualmente cambio por el reflejo del neón, de la dulzura del sonido débil de las aguas del mar al anochecer que inconscientemente cambio por ruido ensordecedor de una wiskeria hasta altas horas de la madrugada.

No soy consciente de mi propia consciencia, ni de mi importancia en el infinito, ni del valor de lo sencillo, y en mi universo no soy el único que colma sus insatisfacciones con alcohol y perdición. La muchedumbre invade las salas de baile y los bares afterhour para buscar una diversión incierta para su olvidar sus propias miserias humanas, sin darse cuenta de que estamos a merced de las vicisitudes, que somos jinetes que cabalgan en soledad, que somos jinetes en la tormenta.


Jim Morrison y The Doors: L.A. Woman.


Preso de la iconografía clásica de mundo del rock Jim Morrison, junto a sus compañeros de andanzas y estudios universitarios Ray Manzarek, Robby Krieger y John Desmore, construyó un universo musical distinto y alejado de los arquetipos clásicos tan usados dentro de la música actual.

Líderes de la escena contracultural de Los Angeles y a contracorriente de los tiempos, en pleno apogeo de la cultura hippie, forjaron un sonido propio que saborea las raices del blues y el rock con paisajes sonoros llenos de matices musicales y de poesia amarga en las letras de sus
canciones.

L.A. Woman sexto álbum en estudio de los Doors, marca el final de la carrera de una banda, tras la lamentable desaparición de Morrison pocos meses después de su grabación.

Volviendo al concepto inicial de su sonido, y usando dosis proporcionadas de blues y r&b, la
poesía de las letras describe los sentimientos de un poeta hacia la ciudad en la que habían trascurrido los últimos años de su vida , y la lucha interna mantenida contra su propio estatus de estrella, tras una vida plagada de excesos y drogas.

Tras una serie de desastrosas sesiones de puesta a punto de la banda en los estudios Sunset Sound de Los Angeles, Paul Rotchild, que había producido los anteriores trabajos, ante la falta de inspiración y motivación de la banda, abandona la tarea. Bruce Botnick toma entonces las
riendas y propone a los chicos abandonar la rigidez de los estudios y trasladarse hasta el local de ensayo, justo en frente de los estudios de Elektra, para que sin la presión de grabar, afloren las ideas que propicien la creacion musical y den el fruto necesario.

Para dar mas libertad a la interpretación musical y la cre
atividad de Ray a los teclados y de Robby a las guitarras, son contratados los músicos de estudio Jerry Scheff (bajista por aquel entonces de la banda de Elvis Presley) y al guitarrista Marc Benno (que posteriormente formó parte de la banda de Leon Russel) con la idea de hacer el álbum practicamente en vivo, evitando las mezclas en lo posible. A tal fin se construye una sala de control y una semana después de los preparativos se comienza a grabar el álbum. Seis días después el álbum está completo, con el record de haber tenido que realizar pocas tomas para la grabación de los temas que lo componen.

Grabando en The Doors Workshop

Desde el primer momento se cuenta con tres temas: Riders on the storm; Love her madly, un tema nuevo compuesto por Krieger y el clásico de John Lee Hooker `Crawling King Snake', cuya grabación se intenta en los Sunset Studios bajo la producción de Paul Rotchild.

Tras el abandono por agotamiento de Rotchild, Bruce Botnic,
propone el tralado del estudio a The Doors Workshop, y con una actitud menos exigente que Rotchild, logra inplicar a los miembros de la banda en la producción del álbum. Las ideas comienzan a surgir y retomando la poesía de Morrison de los días en Venice y de estudios universitarios en la U.C.L.A. cobran vida Cars hiss by my window y L.A. Woman, un poema que trata de la relación de amor/odio de Morrison con la ciudad que le adoptó en aquellos tiempos y con varias mujeres que conoció en esa época.

El espiritú de los Doors se renueva y recobra fuerza creativa, y de ello surgen The Changeling, otro poema de Morrison en la que Krieger tiene la oportunidad de repetir con su guitarra los riffs típicos de la sección de viento de James Brown, y The WASP (Texas Radio and the big beat) un poema de 1968 reescrito por Morrison y que solía recitar en los conciertos de aquella época en el interior de una canción.

Tras la publicación y presentación oficial del álbum en abril de 1971, Jim Morrison se retira junto a su novia Pam, a su exilio Parisino, con motivo de olvidar el mundo del show business y dedicarse a su pasión: la poesía.

En julio de 1971 su cuerpo sin vida es hallado en el interior de la bañera de su apartamento, sin q
ue hasta la fecha se hayan exclarecido las circunstancias de su fallecimiento.

C
on la desaparición de Jim, Robby, Ray y John emprenden diversas aventuras juntos y por separado, sin demasiado éxito y notoriedad en el mundo del rock and roll.


Temas.

De la edición original de 1971:
1. The Changeling.
2. Love Her Madly.
3. Been Down So Long.
4. Cars Hiss By My Window.
5. L.A. Woman.
6. L'America.
7. Hyacinth House.
8. Crawling King Snake.
9. The WASP (The Texas Radio and The Big Beat).
10. Riders on the Storm.

Bonus de la reedición de 2007:
11. Orange County Suite.
12. (You Need Meat) Don't Go No Futher.


La banda.


Jim Morrison: voces.
Ray Manzarek: teclados.
Robby Krieger: guitarras.
John Desmore: batería y percusión.
Jerry Scheff: bajo.
Marc Beano: guitarra rítmica.


Enlaces de interés.


Página oficial de The Doors.
The doors en Youtube.

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